En su primer encuentro con la prensa internacional, en el Palacio de la Moneda, en Santiago, el recién asumido presidente de Chile, Gabriel Boric, afirmó que desea tener buenas relaciones con Brasil. Pero subrayó que hay grandes diferencias entre su gobierno y el del brasileño Jair Bolsonaro. “Resulta que pensamos muy diferente al presidente Bolsonaro sobre la conciencia climática y los derechos humanos”, dijo Boric el lunes (14). “Pero el pueblo brasileño votó por él y lo respetamos”.
Boric también admitió tener estrechos vínculos con el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT) y que lo invitó a su ceremonia de toma de posesión. Según él, el PT se niega a no causar malestar diplomático con el actual gobierno, lo que, agregó el chileno, refleja bien al PT. La expresidenta Dilma Rousseff asistió al evento. También dijo que había hablado con políticos del PT, subrayó que era necesario “aprender de los errores cometidos” y expresó su apoyo en la elección presidencial de este año: “Apoyamos a Lula”.
El nuevo líder chileno destacó que no participará en PROSUL (Foro para o Progresso da América do Sul), una alianza de gobiernos de derecha en América del Sur lanzada en 2019. También dejó entrever que apoyaría la formación de un bloque solo entre los presidentes que comparten el mismo perfil ideológico. Su antecesor, Sebastián Piñera, creó una alianza formada por Brasil, Paraguay y Colombia.
Traducido por Kiratiana Freelon
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