Los políticos de extrema derecha del Partido Republicano de Chile dominarán el consejo constitucional del país después de las elecciones del domingo.

Los republicanos, encabezados por José Antonio Kast, obtuvieron 22 de los 50 escaños del consejo que redactará la nueva constitución.

El partido se ha opuesto durante mucho tiempo a los cambios constitucionales impuestos por la dictadura del general Augusto Pinochet.

Fue una gran derrota para el presidente de centro izquierda de Chile, Gabriel Boric, y la votación también fue vista como un referéndum sobre su gobierno, que actualmente cuenta con una tasa de apoyo de alrededor del 30%.

Unidad por Chile, una coalición de partidos de izquierda aliados a Boric, quedó en segundo lugar con el 28% de los votos. La alianza de centroderecha, Chile Seguro, ocupa el tercer lugar con un 21%. Los votos nulos o vacíos alcanzaron el 21% del total.

Si los dos grupos de centroderecha, el Partido Republicano y Chile Seguro, se unen, entonces los aliados de Boric tendrán poco espacio para influir en el proyecto de ley final. Los recuentos iniciales sugieren que la coalición de izquierda no alcanzará los 21 escaños necesarios para vetar propuestas o forzar el consenso sobre ciertos temas.

La votación del domingo marcó un paso importante en los esfuerzos por producir una nueva propuesta de constitución después de que el 62% de los votantes rechazara una propuesta de carta anterior en septiembre. Esta fue la primera convención en el mundo escrita por una convención dividida equitativamente entre delegados masculinos y femeninos.

Los críticos dicen que el documento es demasiado largo, poco claro y va demasiado lejos en algunas de sus acciones, incluida la caracterización de Chile como un país pluralista, el establecimiento de territorios indígenas autónomos y la priorización del medio ambiente y la igualdad de género.