Las islas y playas de Tailandia son quizás los mejores lugares para unas excelentes vacaciones. Pero la capital, Bangkok, es un marcado contraste, con interminables filas de puestos de comida callejera, centros comerciales y calles concurridas. La velocidad no es inferior a la electricidad. El ostentoso Sukhumvit es el bullicioso centro moderno de la ciudad, mientras que la famosa Khao San Road es el punto de partida de muchas noches difíciles. Aquellos que buscan algo menos agitado pueden disfrutar de impresionantes vistas y excelentes cócteles en uno de los bares de la azotea de Bangkok. Se puede encontrar una sensación de calma en medio del caos en el Gran Palacio junto al río y en el cercano Wat Pho, con su enorme Buda reclinado.
“Escritor. Ninja de la música. Experto en comida extrema. Especialista en redes sociales. Defensor de Twitter”.