12 de noviembre (Reuters) – La empresa de tecnología financiera con sede en Suiza X8 AG obtuvo la certificación de académicos islámicos para su moneda digital, con planes para expandir su negocio en el Medio Oriente, dijo el lunes un alto ejecutivo.

Varias empresas fintech están integrando su tecnología en las finanzas que cumplen con la Sharia, con reguladores y bolsas financieras en la región de Medio Oriente deseosas de atraer nuevos negocios e impulsar la innovación en el sector.

Esto ha llevado a los eruditos islámicos a evaluar la validez religiosa de las monedas digitales, algunos preocupados por la volatilidad de los precios y el tipo de activo detrás de los tokens digitales.

La compañía espera que su criptomoneda basada en Ethereum, que está completamente respaldada por una canasta de ocho monedas fiduciarias y oro, pueda resolver el problema, dijo la directora y cofundadora de X8 Francesca Greco.

“La región del Golfo es realmente un gran lugar para las empresas de tecnología financiera, porque todas quieren ser un centro para fintech”, dijo Greco, y agregó que la compañía abrirá una oficina regional en el Medio Oriente a finales de este mes.

Los reguladores de la región del Golfo han creado un entorno favorable para la tecnología financiera, pero también son cautelosos con las criptomonedas, lo que brinda oportunidades para las llamadas “monedas estables” diseñadas para reducir la volatilidad de los precios, dijo Greco.

La compañía también planea lanzar un criptointercambio que incluirá un componente compatible con la Shariah, y ha mantenido conversaciones con intercambios locales en Abu Dhabi, Dubai y Bahrein, agregó Greco.

La compañía recibió la certificación para su criptomoneda y tokens relacionados de la Oficina de Revisión de Shariyah (SRB), una firma de asesoría islámica autorizada por el banco central de Bahrein.

Las criptomonedas han generado varios juicios de académicos en los últimos años, con diferentes puntos de vista sobre cómo encajan con los principios religiosos que enfatizan la actividad económica real y prohíben la especulación monetaria absoluta.

El debate entre los eruditos islámicos se ha reducido, ya que algunos han comparado el comercio de criptomonedas con la transferencia de derechos, que se consideran permisibles en el Islam. (Reporte de Bernardo Vizcaino; Editado por Gopakumar Warrier)