Los tribunales chilenos aumentaron el martes las penas de prisión para seis ex soldados condenados por uno de los asesinatos más destacados de la antigua dictadura militar: el secuestro, tortura y asesinato del cantante folklórico Víctor Jara, así como de un funcionario del gobierno.
El Tribunal de Apelación dijo que los seis deberían cumplir 25 años de prisión en lugar de los 18 años dictados cuando fueron condenados en 2018. La sentencia de un séptimo veterano aumentó de cinco a ocho años.
Jara, un cantante y profesor universitario muy popular, era un firme partidario del presidente marxista Salvador Allende y fue arrestado pocas horas después de que el general Augusto Pinochet atacara el palacio presidencial y derrocara a Allende el 11 de septiembre de 1973.
Jara fue llevada al estadio nacional con miles de presos más. Le golpearon las manos y la cabeza y le dispararon al menos 44 balas como advertencia a quienes pudieran desafiar la autoridad de Pinochet.
El caso también involucró al jefe del penal de Allende, Littré Quiroga. quien también fue torturado y asesinado en el estadio, aparentemente por los supuestos malos tratos a un oficial que anteriormente había dado un golpe de Estado.
El tribunal de apelaciones dijo que el juez original había clasificado erróneamente el delito como menos grave de lo que realmente era. Dijo que el tratamiento de las víctimas estaba “demostrando la profunda imprudencia y el odio” que se les infligía.
“Este fallo también es significativo porque ahora aborda definitivamente la impunidad mostrada a estos crímenes durante años”, dijo Nelson Caucoto, abogado de la familia Jara.
El tribunal dijo que mientras estuvo detenido, Jara “parecía haberse deteriorado, física y mentalmente, con el rostro hinchado cubierto de innumerables hematomas, manos ensangrentadas y desfiguradas, dedos evidentemente rotos o rotos”.
En total, dijo el juez, Jara tenía 56 huesos rotos además de 44 heridas de bala. Quiroga ha recibido 23 disparos.
Los cuerpos de los dos hombres fueron tirados en un camino polvoriento cerca del Cementerio Metropolitano y luego llevados a la morgue, donde alguien reconoció a Jara e informó en secreto a su esposa, la bailarina británica Joan Turner Jara.
La familia logró exhumar su cuerpo para una autopsia en 2009.
Investigaciones oficiales calculan que más de 3.000 personas fueron asesinadas por el régimen militar de 17 años,
El estadio donde mataron a Jara ha sido renombrado en su honor.
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