WASHINGTON (Reuters) – Mientras el exvicepresidente Joe Biden se acerca cada vez más a ganar la Casa Blanca, el presidente Donald Trump adoptó una postura beligerante el jueves, haciendo afirmaciones falsas para socavar una votación que no salió a su favor.

Mientras que el demócrata Biden pidió calma y paciencia, el republicano Trump, sin aportar pruebas, dijo que sus oponentes participaron en fraude y robo electoral, acusaciones que había formulado mucho antes del día de las elecciones.

“Si cuentas los votos legales, gano fácilmente”, dijo Trump durante sus declaraciones en la Casa Blanca, su primera aparición pública desde el miércoles por la mañana. “Este es un caso en el que están intentando robar las elecciones. Están intentando amañar las elecciones y no podemos permitir que eso suceda”.

Trump declaró que había ganado en estados que favorecían a Biden y criticó duramente las encuestas preelectorales que, según dijo, estaban diseñadas para suprimir la votación porque las elecciones favorecían a los demócratas.

Las encuestas de este año, similares a las de 2016 que ganó, predijeron que el desempeño electoral de Trump fue mucho más débil de lo que logró.

El presidente, una ex estrella de reality shows que aparece regularmente frente a cámaras y multitudes, no respondió preguntas de los periodistas en su primera aparición desde el miércoles por la mañana.

Los comentarios del presidente se producen mientras los resultados electorales siguen avanzando a favor de su rival demócrata.

En la Casa Blanca reinaba una atmósfera sombría. Los asesores del presidente dicen que siguen siendo optimistas de que todavía tiene posibilidades de ser reelegido, pero reconocen que podría perder.

Trump trabajó desde la Oficina Oval el jueves en el ala oeste, prácticamente vacía. Muchos miembros de su personal superior se reunieron en la sede de campaña en la cercana Virginia.

“Está muy involucrado, está monitoreando, hablando con todos los estados. No tiene buena pinta, pero este tipo quiere seguir luchando”, dijo un hombre de confianza de Trump, que habló bajo condición de anonimato. “En este momento está de humor para luchar. No está melancólico ni triste. Pero el camino se está poniendo difícil”.

La campaña presidencial ha planteado numerosos desafíos legales en estados donde aún se están contando los votos.

Un funcionario de la Casa Blanca dijo que confiaba en que la estrategia de impugnación legal prevalecería, incluso si las cadenas de televisión cancelaran la candidatura de Biden después de que se completara el recuento final de votos en estados como Georgia, Arizona y Pensilvania.

Otros lamentaron la pérdida de apoyo entre las mujeres de los suburbios que contribuyó a arruinar las posibilidades de Trump en Wisconsin, y elogiaron al presidente por transformar el Partido Republicano en las próximas décadas al atraer más votos de latinos y afroamericanos.

Nuestros estándares: Principios de confianza de Thomson Reuters.