Unos 700 soldados y policías peruanos reforzarán su frontera sur con Chile para evitar el ingreso de inmigrantes indocumentados, dijeron el viernes las autoridades peruanas, en medio de tensiones diplomáticas entre los dos países por el tema. Cientos de migrantes están varados en la frontera, incluidos en su mayoría venezolanos indocumentados, según la policía peruana. Los migrantes dicen que quieren ingresar a Perú para continuar su viaje a casa.

El ministro del Interior, Vicente Romero, dijo a la radio local RPP que a la frontera habían llegado unos 390 policías y que llegarían otros 300 militares de diferentes puntos del país para sumarse a la misión de vigilancia. “No permitiremos la entrada ilegal, ni ataques a la policía”, agregó.

El gobierno de Perú declaró un estado de emergencia en sus fronteras esta semana para allanar el camino a una operación conjunta entre el ejército y la policía para detener a los migrantes, en un endurecimiento de las políticas de inmigración. El gobierno ha amenazado con expulsar a los extranjeros sin la documentación adecuada.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú convocó al embajador de Chile en Perú para expresar su frustración esta semana, alegando la falta de apoyo chileno. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile dijo que había expresado “malestar” por las críticas al presidente Gabriel Boric por parte del alcalde de Perú. Alrededor de 1,5 millones de venezolanos viven en Perú, la mayoría de los cuales han ingresado desde 2017 cuando el país otorgó permisos de residencia temporal. Muchos aún tienen que oficializar su estatus, según datos oficiales.

También hay un estimado de 300.000 a 400.000 inmigrantes indocumentados en Perú, que tiene una población total de 33 millones.

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