PARÍS/SANTIAGO (Reuters) – Un tribunal francés rechazó el miércoles la apelación de Chile para extraditar a un veterano guerrillero de izquierda que escapó de prisión tras ser declarado culpable de matar a un aliado del ex dictador Augusto Pinochet, lo que provocó una reprimenda inmediata de Chile.

La resolución del tribunal francés es vista por muchos en Chile como una afrenta a la democracia y al sistema judicial del país sudamericano.

“Esta decisión es incomprensible”, dijo a los periodistas el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Roberto Ampuero. “Esto no está en línea con los principios y estándares legales internacionales”.

Francia concedió asilo a Ricardo Palma Salamanca en noviembre de 2018, más de dos décadas después de que las autoridades chilenas lo encarcelaran por el asesinato en 1991 del senador Jaime Guzmán.

El presidente de centroderecha, Sebastián Piñera, envió una carta personal al presidente francés, Emmanuel Macron, pidiéndole que revocara la decisión. El país también presentó un recurso buscando la devolución de Palma Salamanca a Chile.

“El Tribunal de Apelaciones de París dictó una decisión que no respalda la solicitud de extradición de Chile”, dijo un portavoz del tribunal a Reuters el miércoles.

Palma Salamanca, que enfrenta dos cadenas perpetuas en Chile, es mejor conocido por escapar de una prisión de máxima seguridad en Santiago en una canasta de metal colgada de un helicóptero en 1996, humillando al naciente gobierno democrático de Chile y asombrando al mundo.

Posteriormente, el ciudadano chileno cambió su nombre y se escondió entre extranjeros en la ciudad colonial de San Miguel de Allende, México, antes de ser arrestado en París en febrero de 2018.

El rebelde de izquierda fue declarado culpable de matar a Guzmán, aliado de Pinochet, y encarcelado poco después de que el ex dictador dimitiera tras una votación popular. Pero Pinochet siguió siendo comandante de las fuerzas armadas, lo que plantea dudas sobre si Palma Salamanca había recibido un juicio justo.

Los abogados de Palma Salamanca argumentaron que él sólo confesó haber matado a Guzmán bajo tortura.

A pesar de esto, líderes políticos chilenos de todo tipo están pidiendo su regreso.

Chile y Francia no tienen un tratado de extradición y la ley francesa estipula que la extradición no puede llevarse a cabo “si el delito tiene un aspecto político o la solicitud se hace con fines políticos”.